miércoles, 30 de julio de 2014

La importancia de la virtud de la Prudencia.






 
La prudencia es una virtud “especial infundida por Dios en el entendimiento práctico para el recto gobierno de nuestras acciones particularmente en el orden al fin sobrenatural”. (1) Es una de las cuatro virtudes cardinales que consiste “en discernir y distinguir lo que es bueno o malo en cada uno de nuestros actos, para seguirlo o huir de ello”.

Ya Aristóteles definía a la prudencia con mucha exactitud y precisión, como “la recta precisión en el obrar”. De ahí que sea desacertado asociar a la prudencia con el no hacer o no decir nada, con el elegir situaciones acomodaticias y fáciles. Es un error. Hay que asociarla con el acierto en el obrar, ya que quien obra prudentemente es quien acierta en sus decisiones y quien elige la mejor opción analizando las posibles consecuencias futuras.

 La mejor opción a tomar ante cada situación o problema siempre será a la luz de la Verdad y del Bien, ya que Jesús dijo: “Yo soy el camino, la Verdad y la Vida”. Es como si Dios mismo nos dijera: “Síganme, es por acá…de ahí que lo que dios enseña como el verdadero camino (a través de él y de su iglesia) es lo bueno y lo prudente será seguirlo. Lo que no, lo que prohíbe, es y será lo malo para nosotros.

Tampoco hay que asociar a la prudencia con el ser desconfiado de todos y por todo. El dicho: “piensa mal y acertarás” no es propio de un espíritu noble ni es cristiano. Lo noble y lo cristiano es analizar prudentemente con objetividad la situación, el tema a definir o la persona con la que realizaremos un trato antes de tomar una decisión que siempre tendrá consecuencias. Existe en nuestra vida cotidiana una ausencia casi total de la virtud de la prudencia que nos hace meditar primero, analizar y sopesar luego las consecuencias de cada uno de nuestros actos, porque la cultura actual ha despojado al hombre del hábito de utilizar la razón y la inteligencia. Se le ha impuesto a rajatabla el manejarse por los sentidos, por las “ganas”. Es por eso que no entiende esta virtud superior que pertenece al ámbito de la voluntad y de la inteligencia. Sin embargo es la clave para achicar todo margen de error y para la convivencia en paz.

La prudencia, que es la madre de las virtudes, es imprescindible en todas las relaciones humanas, de ahí que el nivel de nuestra prudencia marcará el termómetro de nuestra madurez como personas y nos otorgará el modo de ser equilibrado y sereno. Lamentablemente nos limitamos a pensar en ella solamente cuando nos referimos a manejar automóviles, fuera de este concepto, rara vez la palabra prudencia está presente en la filosofa de nuestras vidas. Se asocia por lógica a la prudencia con los adultos y a los jóvenes con la imprudencia (debido a la falta de experiencia). De hecho no siempre es así. Debería ser así…porque los años debieran enseñarnos a sopesar nuestras decisiones con objetividad (por haber comprobado por experiencia que todas nuestras decisiones tienen consecuencias para bien o para mal en mayor o menor grado, no sólo sobre nuestras vidas sino sobre las vidas ajenas). Pero la realidad es que hay jóvenes prudentes en su forma de vivir y comportarse porque son virtuosos y personas mayores que se conducen imprudentemente porque no lo son.

La mujer necesita ejercitar una doble dosis de prudencia en sus relaciones con los demás ya que de ella depende, en principio, el orden moral y los usos y costumbres de la sociedad. Muchas veces tendrá que privarse de lo lícito (como será por ejemplo, no bajar en la casa de su amiga si ella salió y el marido está solo), en aras de evitar cualquier riesgo de incomodidad en su amiga, y, mucho menos algo más grave (como el inicio de una relación). Esperar a nuestra amiga en su casa si está su marido solo no es ni será pecado, pero si no es necesario hacerlo (debido a una urgencia o imprevisto) no “corresponde” simplemente porque no es prudente pasar por esta situación de intimidad. No todo es pecado, pero prestarle atención a este tipo de comportamiento es lo que nos protegerá de cometer faltas más graves.

 

De estos actos de exquisita prudencia y dominio de sí dependerá el evitar muchos problemas futuros. El único modo de no generar daños morales es no empezar, y para no empezar situaciones que tal vez nos desbordarán, tenemos que dejarnos aconsejar por la virtud de la prudencia, tratando de actuar siempre como “corresponde”.

Dijimos que la persona prudente es la que toma la mejor decisión, en el momento oportuno. No cabe duda de que hay en la prudencia una nota moral. Lo que se debe hacer o decir según la ley de Dios y no cualquier cosa, ni lo que a mí me parece. Incluso lo bueno puede no ser prudente si no se hace en el momento adecuado. Por ej.:

Hacerle una comida muy elaborada a quien queremos, con afecto y dedicación, (es bueno), pero no será prudente si la misma persona está enferma o tiene que bajar de peso por orden médica.

Corregir una falta a quien yerra, (es bueno), pero no será prudente cuando la persona está alterada, cansada o en público, si no es necesario.

Crear una sociedad laboral con un familiar o amigo para ayudarlo, (es bueno), pero no será prudente si conocemos su falta de honestidad que al final destrozará nuestra relación y la de toda la familia.

Elogiar a uno de los hijos por sus logros, (es bueno), pero no será pru-dente hacerlo frente a los que tienen serias dificultades con su baja auto estima.

Decidir estudiar una materia, jugar al tenis, etc, (es bueno), pero no será prudente hacerlo con la novia de mi amigo porque me gusta mucho... y menos pasarle los apuntes que necesita (no en el colegio delante de todos sino a solas en la confitería de la vuelta).

Elegir como grupo de estudio a mis amigos, (es bueno), pero no actuaré con prudencia si son los más vagos del curso.

Tomar un empleado con dudosos antecedentes, (puede ser bueno para darle una segunda oportunidad), pero no seré prudente si le doy cargos de responsabilidad.

Ofrecerme gentilmente a manejar, (es bueno), pero no seré prudente ni responsable si lo hago sólo para lucirme cuando sé que he tomado de más y hay otros que pueden hacerlo mejor.

Permitir que nuestros hijos tengan amigos que piensen distinto, (puede ser bueno para enseñarles a confrontar distintas realidades), pero no será prudente en la primera infancia que es cuando tienen que crecer, formarse y apuntalarse.

Regalar una caja de bombones, (es bueno), pero no es prudente a quien sufre del hígado o insistir en llenarle la copa a quien sabemos que toma de más.

Dejar que los niños jueguen libremente(es bueno), pero no será prudente dejarlos correr alrededor de las hornallas encendidas de la cocina al alcance del mango de la sartén.

Visitar a nuestros amigos o familiares, (es bueno), pero no cuando sabemos que tenemos una enfermedad contagiosa como la conjuntivitis.

Tener un perro, (es bueno), pero, si es de gran kilaje y raza agresiva no actuaremos prudentemente si lo llevamos suelto por la calle, sin mordaza, cometiendo además la injusticia de exponer la seguridad de otros.

Verme con mi novio, (es bueno), pero no es prudente subir a visitarlo si sé que está estudiando solo. Salir con alguien que conocí en un lugar bailable, (puede ser bueno), pero no es prudente si voy sola, si no sé quién es, ni tengo medios para informarme.

Tener buena relación con mis compañeros de trabajo, (es bueno), pero no es prudente aceptar tomar un café fuera de la oficina con nuestro compañero de trabajo (que es padre de familia y está pasando por una seria crisis en su matrimonio) etc.

Un comportamiento prudente siempre será un comportamiento equilibrado, que tomará decisiones cotidianas y serias, pero siempre midiendo y analizando el margen y sus consecuencias y eligiendo, en base a esto la mejor opción.

Es una actitud prudente rodearse de personas sólidas a quienes poder pedir consejos, o personas capacitadas en distintos temas para reducir los márgenes de error en los distintos frentes que nos presenta la vida. Un buen amigo no necesariamente podrá aconsejarnos en todo ni tiene porqué saber de todos los temas. Habrá que seleccionar para cada materia la persona adecuada que nos habrá hecho ganar su confianza por la manera en que se ha conducido en la vida.

“No consultes, dice el Eclesiástico (37,12) las cosas santas con un hombre sin religión, la justicia con un injusto, la guerra con un cobarde, la gratitud con un envidioso, un trabajo cualquiera con un perezoso: no le hagas caso en ningún consejo. Más sé asiduo en escuchar a un hombre piadoso.” (2) Siempre será una actitud prudente el abrirnos a recibir un consejo de los que saben, mientras que el transmitir todo resuelto sin jamás aceptar un consejo demuestra además de imprudencia, necedad.

 Entonces, o nos regimos por la prudencia, que es el actuar “aquí y ahora” según lo que es recto y bueno para todos o nos regimos por las “ganas” que son antojadizas, inestables, egoístas y... hasta asesinas... porque muchas veces la gente mata físicamente o espiritualmente porque siente “ganas” de matar... Por último: ¿Quién no sintió “ganas” de matar alguna vez? ... Si no hay otro elemento que frene nuestras “ganas” (en todos los órdenes) nuestro accionar será siempre peligroso. Una madre nunca tiene “ganas” de levantarse a medianoche cruzando una casa tal vez helada para cambiar un pañal o alimentar a su bebé. Lo hace porque sabe que dormirá mejor o porque sabe que su hijo tiene hambre. Como así también, lo bueno es visitar a mi abuela aunque no tenga “ganas” porque presiento que ella estará esperando mi visita que le dará tal vez sentido a toda su tarde.

Es necesario destacar la importancia de la prudencia en el hablar en donde cometemos tantísimas faltas de prudencia.


Esta es la faceta que atañe a la virtud de la discreción donde nos desordenamos con comentarios fuera de lugar, intransigentes y terminantes que incomodan y podríamos haber evitado. Comentarios y preguntas indiscretas hechas en público sobre temas delicados y privados, elogios a otros ante personas muy susceptibles, inflexibilidad en los juicios cuando hablamos de temas que no merecen la pena.

 La falta de prudencia en el hablar no sólo es por lo que decimos sobre lo que pensamos, sino por lo que repetimos de lo que escuchamos. Muchas veces, corazones desbordados o angustiados nos hacen confidencias que son para ser guardadas bajo llave dentro de nuestro corazón, pero no para ser transmitidas al resto, violando la intimidad ajena.

Mucho peor, muchísimo peor es si dejamos correr lo que escuchamos de una conversación ajena y privada, ya sea porque levantamos un teléfono y nos quedamos escuchando lo que no debíamos, o porque lo oímos del cuarto de al lado o porque la ventana del departamento vecino estaba abierta o porque en el piso de arriba discutían en voz alta.

 En una época como la nuestra, en que lo emotivo y lo sensible es lo que prima (porque la revolución anticristiana lo fomenta) y todo está incentivado a que nos manejemos según lo que sentimos, la virtud de la prudencia (que pertenece al reino de la razón y de la inteligencia) no goza de mucha popularidad.

Lo que nos transmite la cultura actual es el manejarnos por el día a día según lo que nos dicten las “ganas” y lo sensible. Hacer lo que nos gusta y rechazar lo que no nos gusta, ese es en general actualmente nuestro timón y consejero.

Nuestra guía debería ser, por el contrario, nuestro juicio final ante Dios. Aquello que nos pesará haber hecho cuando tengamos que enfrentar la muerte será lo malo que no deberemos cometer, y lo que estará en nuestro activo para presentar como buenas obras al final será lo bueno, porque como reza el sabio refrán: “Al final de la jornada, aquel que se salva sabe, y el que no, no sabe nada…”


Fuente: Catholic.net

viernes, 25 de julio de 2014

Decálogo de la Serenidad.





Decálogo de la Serenidad




  1. Sólo por hoy trataré de vivir este día sin querer resolver los problemas de mi vida todos de una vez.
  2. Hoy tendré cuidado de mi aspecto y mi forma de ser: seré amable, no haré daño a nadie con mis formas, no criticaré a nadie y no pretenderé mejorar a los demás antes que a mí mismo.
  3. Sólo por hoy seré feliz en la certeza que he sido creado por Dios para la felicidad, no sólo en otro mundo, si no en este también. Pase lo que pase.
  4. Sólo por hoy me adaptaré a las circunstancias que me que me toque enfrentar, sin pretender que las circunstancias se adapten a mis deseos.
  5. Hoy dedicaré a menos 10 minutos a la oración o a una buena lectura; recordando que, como el alimento es necesario para la vida del cuerpo, así la oración o una buena lectura es necesaria para la vida del alma.
  6. Solo por hoy haré  una buena acción y no lo diré a nadie. Si, hoy haré sonreír a alguien….. Es la señal del buen cristiano.
  7. También sólo por hoy hare por lo menos una cosa que me cueste y que me fortalecerá mi voluntad, y si mis sentimientos se oponen, los venceré, aunque nadie se entere.
  8. Solo por hoy trataré de vivir con orden y si es posible, con un pequeño programa, aunque no lo cumpla. Y me guardaré de tres peligros: la prisa, la indecisión y sobretodo el agobio.
  9. Sólo por hoy no tendré miedos, sobretodo esos miedos que últimamente me quitan la paz. Todo termina bien cuando confío y actúo rectamente. Sobre todo no tendré miedo de gozar de lo bello y de creer en la bondad de los que me rodean.
  10. Aunque las circunstancias no me ayuden, hoy creeré firmemente que la providencia de Dios se ocupa de mí, como si yo fuera el único que existe en este mundo porque yo creo que Dios así me ama.



Fuente: Decálogo escrito por Juan XII



Mensaje de la Virgen día 25 de Julio 2014








“Queridos hijos, ustedes no son conscientes de las gracias que viven en este tiempo, en que el Altísimo les da señales para que se abran y se conviertan. Regresen a Dios y a la oración, y que en sus corazones, familias y comunidades reine la oración, para que el Espíritu Santo los guíe y los anime a estar cada día más abiertos a la voluntad de Dios y a Su plan para cada uno de ustedes. Yo estoy con ustedes, y con los santos y los ángeles intercedo por ustedes. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!”


miércoles, 23 de julio de 2014

Confía en mí.


Cuando vi esta imagen pensé en compartirte lo que se que a ti también te hizo sentir, en muchas ocasiones, de hecho en la mayoría de las circunstancia de nuestra vida, no sabemos cómo responder cuando Dios nos pide algo.


Pero no te has puesto a pensar porque si él es el Padre más amoroso, quién es el único que nunca te falla y que te lo ha demostrado en tantas ocasiones en tu vida de diferentes maneras y aún así te cuesta trabajo responder con facilidad a lo que él te pide, a hacer su voluntad, a entregarle lo que tienes, lo poco que de tu parte posees.
Pues hacer la voluntad de Dios no es fácil, pero no es por el mismo Dios o porque él te pida mucho, el sólo te pide confiar, eso es lo único que te pide, CONFIAR, pero creo que eso es lo difícil, ese es el problema.

Siempre sabemos que Dios nos da lo mejor, sólo debemos aprender a desprendernos de nuestros propios deseos y aspirar a anhelar los deseos de Dios, es decir, elevar nuestros anhelos, nuestros ideales y nuestros sueños.

Nunca lo que deseamos es tan bueno como lo que Dios tiene para nosotros y nunca es tan difícil aceptarlo como cuando vemos solo con nuestros ojos, y esto es por algo muy sencillo, nuestros anhelos siempre son muy terrenales, no es malo, pero el quiere darnos algo que nunca termina,por eso empieza a trabajar en conocer primero el amor de Dios, porque no podrás nunca darte cuenta de lo que él quiere para ti y de cuanto te ama si tu sólo piensas en ti.
Pon lo poco que tienes en manos de quien te ama, y el pondrá en tus manos dones, bendiciones y muchas cosas más de las que puedes imaginar.

Así que no te limites a pensar en tus deseos, mejor piensa en sus deseos y confía, siempre confía en su amor infinito, déjate amar por él, que nunca te va a pedir para dejarte con las manos vacías.

Autor: Myriam Orozco

lunes, 21 de julio de 2014

Fátima: manuscrito del tercer secreto on line




Forma parte de la exposición . El papa Francisco autorizó expresamente la exposición del manuscrito


Roma, (Zenit.org) H. Sergio Mora


El manuscrito de la hermana Lucía, sobre el tercer secreto de Fátima ahora es posible verlo también on-line, como parte del recorrido sobre las apariciones que se abrió al público en el santuario mariano de Portugal el 30 de noviembre del 2013 y que estará abierto hasta el 31 de octubre próximo.

La portavoz del santuario de Fátima, Leopoldina Reis Simoes le confirmó telefónicamente a ZENIT la iniciativa e indicó que ha sido realizada utilizando las nuevas tecnologías de manera que la exposición sea accesible al mayor número de personas y no solamente para los miles de peregrinos que llegan personalmente hasta el santuario, quienes hasta el 13 de julio fueron 107.057 visitantes.

La portavoz envió además un comunicado indicando que la inauguración coincide con el mes en el cual la Virgen María le revela a los tres pastorcitos -Lucía, Francisco y Jacinta- el llamado secreto de Fátima.

"El secreto y la revelación" pone de relieve las tres partes de llamado secreto de Fátima y muestra por primera vez al público el manuscrito del Tercer Secreto, escrito por la vidente Lucía, que pertenece a los archivos de la Congregación para la Doctrina de la Fe y que está expuesto en Fátima gracias a la autorización dada por el papa Francisco.

El recorrido expositivo tiene como guía la interpretación teológica del Secreto de Fátima que hizo el cardenal Joseph Ratzinger, y que lleva al visitante a entrar en las tres partes de mensaje, titulado: "La visión del infierno", "El Corazón Inmaculado María ", y" La Iglesia mártir".

"Tomando como lema la aparición del mes de julio de 1917, el Santuario de Fátima presenta, a través de la documentación histórica y del legado artístico, uno de los temas más importantes de Fátima: el secreto que desde la Cova da Iría lleva a la contemplación de todo el mundo contemporáneo” indicó el director de estudios y responsable de la exposición, Marco Daniel Duarte.

Para aquellos que pueden viajar a la Cova da Iria, "El secreto y la revelación", seguirá abierto al público hasta finales de octubre, con entrada gratuita entre las 9 y las 19 horas, en el nivel inferior de la Basílica de la Santísima Trinidad en el Convivium de San Agustín.  


 

miércoles, 16 de julio de 2014

El escapulario que porto San Juan Pablo II Reliquia en Wadowice.


Se encuentra en Wadowice el escapulario de la Virgen del Carmen que llevaba Juan Pablo II (que se ha convertido en una preciosa reliquia) desde la edad de 10 años. «En Wadowice –cuenta Karol Wojtyla en el libro “Don y Misterio” – había sobre una colina un monasterio carmelita, cuya fundación se dio en tiempos de San Rafael Kalinowski. Los habitantes de Wadowice lo frecuentaban numerosos, y ello no dejaba de reflejar una difundida devoción por el escapulario de la Virgen del Carmen. También yo lo recibí, creo que a los 10 años, y lo llevo todavía.

 




También se iba con los carmelitanos para confesarse. Así fue que, tanto en la Iglesia parroquial como en la del Carmelo, se formó mi devoción mariana durante los años de la infancia y de la adolescencia». 

 

 Según lo que afirmó él mismo, Wojtyla nunca se separó de aquel pedazo de tela que (según la tradición carmelita) ofrece a todos los que lo llevan con devoción el llamado “privilegio Sabatino”, que promete el abrazo de la Virgen María el primer sábado después de la muerte. Por una misteriosa coincidencia, sabemos que Juan Pablo II murió a las 21.37 del 2 de abril de 2005, justamente era un sábado, «mientras en la Plaza San Pedro –recuerda el teólogo carmelita Antonio Maria Sicari– se cantaba el “Salve Regina”, como se hace todos los sábados por la noche, desde hace 800 años, en todas las iglesias carmelitas. Humildes y dóciles coincidencias para los ojos simples de los que creen que en el Paraíso se cultiva una delicada atención a los particulares».      


 
Karol Wojtyla llevaba el escapulario también durante el atentado del 13 de mayo de 1981. «No se quería separar de él –escribe el postulador de la causa de beatificación, don Oder Slawomir–, ni siquiera en el quirófano». El Papa Benedicto XVI, durante el Ángelus dominical, quiso recordar esta particular devoción del Papa polaco.          



 
Ahora, el escapulario de Juan Pablo II se encuentra custodiado en la ciudad natal del amado Pontífice, en Wadowice, como una reliquia en el altar de la Virgen del Carmen, en donde el joven Karol lo había recibido.

 

Michelangelo Nasca Roma

Fuente: La Stampa

Especial "ESCAPULARIO" 3


7.- Indulgencias

 
He aquí las indulgencias plenarias y parciales para los que visten el escapulario.

A).- Indulgencias plenarias.-
1. El día que se viste el escapulario y el que es inscrito en la Tercera Orden o Cofradía.

2. En estas fiestas:
a) Virgen del Carmen (16 de Julio o cuando se celebre);
b) San Simón Stock (16 de mayo);
c) San Elías Profeta (20 de Julio);
d) Santa Teresa de Jesús (15 de Octubre),
e) Santa Teresa del Niño Jesús (1 de octubre);
f) San Juan de la Cruz (14 de Diciembre);
g) Todos los Santos Carmelitas (14 de Noviembre).


B).- Indulgencias Plenaria el día del Carmen.- El día del Carmen, 16 de Julio, o en la fecha que exactamente se celebre, tiene concebida una indulgencia plenaria.
C).- Indulgencia parcial.- Se gana indulgencia parcial por usar piadosamente el santo escapulario. Se puede ganar no sólo por besarlo, sino por cualquier otro acto de afecto y devoción. Y sólo al escapulario, sino también a la medalla-escapulario.


8.- Recomendación pontificia

Desde el siglo XVI -que es cuando se extiende por toda la cristiandad el uso del escapulario del Carmen- casi todos los Papas lo han vestido y propagado. El Papa Juan Pablo II, que es terciario carmelita, ha recordado en diversas ocasiones que viste con devoción, desde niño, el escapulario del Carmen.

La Iglesia, como reconocimiento y estímulo de las más importantes verdades y prácticas cristianas, instituye las fiestas litúrgicas (misa y oficio propio, etc.). Ese es el valor que tiene la fiesta de la Virgen del Carmen, el 16 de julio, extendida por Benedicto XIII a toda la Iglesia universal. Además a la Virgen del Carmen la veneran como Patrona de pescadores, marineros y toda la gente del mar; también la república de Chile bajo su advocación de Nuestra Señora del Carmen de Maipú.
9.- Bendición e imposición

La Sagrada Penitenciaria Apostólica -de quien depende esta legislación- ha dicho que se recomienda el uso tradicional del escapulario en cuanto a tamaño, materia, color, etc., que pueden usarse también otros.

Cualquier sacerdote puede bendecir e imponer el escapulario del Carmen a los fieles en general.

Para quedar inscrito en la cofradía organizada o Tercera Orden del Carmen, este sacerdote debe estar facultado por el superior General de los Carmelitas. Los simples fieles no pueden bendecirlos ni imponerlos.

Esta es la fórmula para bendecirlo e imponerlo: V: Muéstranos Señor, tu misericordia.-
R: Y danos tu salvación.
V: Escucha, Señor, mi oración.
R: Y llegue a ti mi clamor.
V: El Señor esté con vosotros.
R: Y con tu espíritu.

OREMOS. Señor nuestro Jesucristo, Salvador del género humano, bendice con tu diestra a este hábito que, por tu amor y el de tu Madre la Virgen María del Monte Carmelo, va a llevar con devoción tu siervo (o sierva), a fin de que por la intercesión de tu misma Madre y defendido(a) del maligno espíritu, persevere en tu gracia hasta la muerte: Que vives y reinas por los siglos de los siglos.- R: Así sea.





A continuación rocía el escapulario con agua bendita y después lo impone a la persona o personas (a cada una por separado). Diciendo a cada una.

Recibe este hábito bendito, suplicando a la Santísima Virgen que, por sus méritos, lo lleves sin mancha, le defienda contra todas las adversidades y te conduzca a la vida eterna. R: Así sea.

Y añade: Yo, usando de la potestad que se me ha concedido, te recibo a la participación de todos los bienes espirituales que, por la misericordia de Jesucristo, practican los religiosos Carmelitas. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.- R: Así sea.

Que te bendiga el Creador del cielo y de la tierra, el Dios todopoderoso, que se ha dignado incorporarle a la Cofradía de la Santísima Virgen del monte Carmelo, a quien imploramos que en la hora de tu muerte abata la cabeza de la serpiente infernal y finalmente, consigas las palmas y la corona de la herencia sempiterna. Por Jesucristo nuestro Señor.- R: Así sea. Y rocía el nuevo cofrade con agua bendita. Cuando son más de una de las personas que han de recibir el santo escapulario, se dice en plural. No deje de exhortarles a que vistan dignamente el escapulario, tratando de imitar las virtudes de María.

En caso de necesidad, basta para bendecir el escapulario la señal de la cruz del sacerdote y las palabras. "En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, Amén".


10. Tipos de escapularios Escapulario café (Carmelita)

La Virgen María, se aparece al General San Simon Stock, en el convento de la ciudad de Cambridge (Inglaterra) el 16 de julio de 1251. San Simón, ya cansado por su avanzada edad, y debilitado por la penitencia, pedía a Dios por las angustias y tribulaciones que su orden padecía constantemente. Suplicaba a la Virgen, que lo socorriera con una Gracia especial. Ella, ante el llamado suplicante de su hijo, apareció rodeada de ángeles, con el Escapulario en sus manos. Le dijo : " Recibe, hijo mío, amadísimo, esta prenda de mi amor para con vosotros, este será un privilegio, para ti y para todos cuantos lo usen ; Quien muera con él, no irá al fuego del infierno".
Escapulario verde

Cuando en la familia hay algún familiar o amigo que se encuentra lejos de la fe y uno desea hacer algo al respecto, María Madre Santísima nos dió una forma de convertirles cuando ella se le apareció a la Hermana Justina Bisqueyburu en 1840, llevando "la vestidura de la conversión - El escapulario verde." Ella dijo:
" Esta insignia santa de mi Inmaculado Corazón ha de ser un gran medio para la conversión de almas..."
Por un periodo de mas de seis años, La Virgen se le apareció a la Hermana Justina y le respondió muchas preguntas con relación al escapulario y a su uso. La Virgen María dijo que el Escapulario Verde no necesita ninguna bendición especial, y no necesita inscripción como el Escapulario Café. Puede ser bendecido por cualquier Sacerdote. Si la persona que nosotros queremos que se beneficie de este escapulario no conviene en llevarlo consigo, este se puede colocar en cualquier sitio de su habitación. Cada día se debe decir la siguiente oración: "Inmaculado corazon de maria, ruega por nosotros ahora y en la hora de nuestra muerte" Si la persona por quien se tiene intención en el escapulario no va a decir la oración, entonces aquel que lo regala debe de decirla en su lugar, todos los días. La Virgen María dijo:
"Las gracias mas grandes se obtienen por el uso del escapulario, pero estas gracias vienen en proporción directa con el grado de confianza que el usuario tenga en mi." Santa Brigida tenía tal confianza en la Virgen María. Por esto la Virgen le reveló:" no hay pecador en el mundo, que aunque se encuentre en enemistad con Dios, no pueda regresar a Dios y recuperar su Gracia si el o ella tiene recurso a mi y pide mi asistencia."

 Fuente: Aciprensa

martes, 15 de julio de 2014

Especial "ESCAPULARIO" 2



5.- Privilegio sabatino 

El Escapulario del Carmen además de la promesa de salvación para quienes mueran con él, lleva también consigo el llamado privilegio sabatino.
Según la tradición, a la muerte de Clemente V (1314), en el cónclave que duró dos años y tres meses, la Santísima Virgen se apareció al Cardenal Jaime Duesa, muy devoto de ella, y le anunció que sería Papa con el nombre de Juan XXII, y añadió: "Quiero que anuncies a los Carmelitas y a sus Cofrades: los que lleven puesto el Escapulario, guarden castidad conforme con su estado, y recen el oficio divino, - o los que no sepan leer se abstengan de comer carne los miércoles y sábados -, si van al purgatorio Yo haré que cuanto antes, especialmente el sábado siguiente a su muerte sean trasladadas sus almas al cielo".




Se ha escrito mucho sobre la "Bula sabatina", que en ese sentido publicó Juan XXII, pero no hay suficientes pruebas documentales de ella. Sin embargo en el siglo XV es muy citada, por ejemplo por el seudopapa Alejandro V (elegido por el Concilio de Pisa, después de haber éste destituido a Gregorio XII y Benedicto XIII, para acabar con el cisma; pero es claro que uno de ellos debía ser legítimo, y un concilio no puede destituirle, sin embargo algunos, como San Roberto Belarmino, consideran a Alejandro V Papa verdadero, y el próximo Alejandro se tituló VI); aunque su bula de 7-07-1409 confirmando el Escapulario no tenga valor magisterial, es interesante su testimonio de que conocía la de Juan XXII. Esta también fue citada por Sixto IV (1-04-1477), Clemente VII (1530) y San Pío V (1566) - quienes además citan y confirman la de Alejandro V -; etc.
En las citas de la "Bula sabatina" por los diversos autores, se encuentran diversas lecturas de ella (lo que prueba que no dependen de un solo documento inmediato). Por ejemplo, algunos en vez de ser "sábado" cuando la Virgen socorre a los cofrades del purgatorio leen "súbito" (cuanto antes), lo que parece una errata de transcripción, aunque así ha pasado a la liturgia y a las encíclicas de Pío XII.
El privilegio sabatino fue muy impugnado, no histórica, sino teológicamente, llegando el Inquisidor General de Portugal, en 1609, a prohibir a los Carmelitas el predicarlo. Estos apelaron al Romano Pontífice, quien confió la causa al Santo Oficio, y por fin, en 1613 dio un decreto renovado literalmente por Inocencio XI (1678), San Pío X (1908) y Pío XI (1922). En él se estableció: se permite a los PP. Carmelitas predicar que el pueblo cristiano puede creer... (sigue lo dicho antes).


Pío XII en su citada Carta Magna del Escapulario del Carmen de 1950, enseña: "A la verdad, no dejará la piadosísima Madre que sus hijos que expían sus culpas en el purgatorio, no consigan cuanto antes la vida eterna por su intervención delante de Dios, en conformidad con el privilegio sabatino".
En resumen: el privilegio sabatino consiste en que la Santísima Virgen sacará del purgatorio cuanto antes, especialmente el sábado después de su muerte, a quienes hayan muerto con el Escapulario y durante su vida hayan guardado castidad según su estado y rezado todos los días el oficio parvo. (Este se puede sustituir por la Liturgia de las Horas o por la abstinencia de carne los miércoles y sábados, o un sacerdote con facultad para ello, lo puede conmutar por otra obra piadosa, v.gr. el rezo diario del Rosario). Si uno peca contra la castidad o deja un día de hacer la obra prescrita, podrá recuperar el privilegio al confesarse y cumplir la penitencia (de manera semejante a como se recuperan los méritos perdidos por el pecado mortal, lo cual parece casi excesiva generosidad de Dios, pero es doctrina católica).
La certeza de este privilegio más que histórica, como decíamos del Escapulario, está fundada en la potestad de la Iglesia que así lo propone y recomienda. Sería temerario y ofensivo para la Iglesia, cuya Cabeza es Cristo y su alma vivificante el Espíritu Santo, creer que comete una equivocación secular y universal en algo que pertenece a la doctrina y vida cristiana.
En 1950 recordaba Pío XII: "Ciertamente, la piadosa Madre no dejará de hacer que los hijos que expían en el Purgatorio sus culpas, alcancen lo antes posible la patria celestial por su intersección, según el llamado privilegio sabatino, que la tradición nos ha trasmitido" con estas palabras:
"Yo, su Madre de Gracia, bajaré el sábado después de su muerte y a cuantos - religiosos, terciarios y cofrades - hallaré en el Purgatorio los liberaré y los llevaré al monte santo de vida eterna".

6.- Protección maternal
Por su profundo simbolismo mariano, por los grandes privilegios y por el gran amor y privilegiada asistencia, que ha manifestado a través de los siglos la Santísima Virgen del Carmen a quienes visten devotamente su escapulario, es lo que tan prodigiosamente se ha extendido por doquier esta piadosa devoción de vestir su escapulario.
Sobre todo por su rico simbolismo: ser hijo de María, ver en él todas las virtudes de María, ser símbolo de nuestra consagración filial a la Madre Amable. Por Morir en gracia de Dios, quien lo vista piadosamente.
  • Por que saldrá del Purgatorio cuanto antes quien muera devotamente con él.
  • Por llegar su protección a todos los momentos de la vida, a la muerte y aún más alla". En la vida protejo; en la muerte ayudo, después de la muerte salvo, con sus credenciales.
  • Por los innumerables prodigios que ha obrado.
  • Por las relaciones con sus apariciones mas recientes en Lourdes y Fátima.
Por las muchas indulgencias que disfrutan quienes visten este escapulario.

Fuente: Aciprensa.



lunes, 14 de julio de 2014

Especial "ESCAPULARIO" 1


1. ¿Qué es?
El escapulario del Carmen es el signo externo de devoción mariana, que consiste en la consagración a la Santísima Virgen María por la inscripción en la Orden Carmelita, en la esperanza de su protección maternal. 
El distintivo externo de esta inscripción o consagración es el pequeño escapulario marrón.
El escapulario del Carmen es un sacramental, es decir, según el Concilio Vaticano II, "un signo sagrado según el modelo de los sacramentos, por medio del cual se significan efectos, sobre todo espirituales, que se obtienen por la intercesión de la Iglesia". (S.C.60). 





2.- Origen y propagación
A finales del siglo XII o principio del XIII nacía en el monte Carmelo, de Palestina, la Orden de los Carmelitas. Pronto se vieron obligados a emigrar a Occidente. En Europa, tampoco fueron muy bien recibidos por todos. Por ello el Superior General de la Orden, San Simón Stock, suplicaba con insistencia la ayuda de la Santísima Virgen con esta oración:

Flos Carmeli
Vitis Florigera
Splendor coeli
Virgo puerpera
Singularis y singular
Mater mitis
Sed viri nescia
Carmelitis
Sto. Propitia
Stella maris
Flor del Carmelo
viña florida
esplendor del Cielo
Virgen fecunda
¡Oh madre tierna!
intacta de hombre
a los carmelitas
proteja tu nombre
(da privilegios)
Estrella del mar.

 En 1251, la Bienaventurada Virgen María, acompañada de una multitud de ángeles, se apareció a San Simón Stock, General de los Carmelitas, con el escapulario de la Orden en sus manos, y le dijo: "Tú y todos los Carmelitas tendréis el privilegio, que quien muera con él no padecerá el fuego eterno"; es decir, quien muera con él, se salvará.




Este relato lo encontramos ya en un santoral de fines del siglo XIV, que sin duda lo toma de códices más antiguos. En el mismo siglo XIII Guillermo de Sandwich O.C. menciona en su "Crónica", la aparición de la Virgen a San Simón Stock prometiéndole la ayuda del Papa.
La promesa del escapulario es de tal trascendencia, que precisamente por ello suscitó fuerte oposición.
3. Significado del Escapulario

Al vestir el escapulario, y durante toda la vida, es muy importante que sepamos apreciar su profundo y rico significado, como pertenencia a una Orden, a la del Carmen, con obligación de vivir según su rica espiritualidad y su propio carisma. Quien viste el escapulario debe procurar tener siempre presente a la Santísima Virgen y tratar de copiar sus virtudes, su vida y obrar como Ella, María, obró, según sus palabras: "He aquí la esclava del Señor, hágase en mí según tu palabra".

El escapulario del Carmen es un MEMORIAL de todas las virtudes de María. Así lo recordaba a todos: religiosos, terciarios, cofrades. "Que forman, por un especial vínculo de amor, una misma familia de la Santísima Madre", el Papa Pío XII, el 11.2.1950.



Reconozcan en este memorial de la Virgen un espejo de humildad y castidad.
  • Vean, en la forma sencilla de su hechura, un compendio de modestia y candor.
  • Vean, sobre todo, en esta librea que visten ida y noche, significada, con simbolismo elocuente, la oración con la cual invocan el auxilio divino.
  • Reconozcan, por fin, en ella su consagración al Sacratismo Corazón de la Virgen Inmaculada, s recientemente recomendada".
Cada escapulario tiene sus privilegios o gracias particulares, pero todos pueden sustituirse por la medalla-escapulario (cfr. Decreto de 16-XII-1910). Sería falta de fe en la autoridad suprema del Vicario de Cristo que confiere a esta medalla tal privilegio, creer que vale menos, para ganar las promesas, llevar la medalla que los trozos de paño (aunque en determinados casos, por otras razones externas de mayor visibilidad, etc., puede ser preferible el escapulario de paño).



La medalla-escapulario debe tener por una parte la imagen de Jesús con el Corazón, y por la otra una imagen de la Virgen bajo cualquier advocación. Lo mismo que los escapularios ha de estar bendecida por un sacerdote.
4. Valor de la promesa del Escapulario
Es doctrina católica, repetida por el Concilio Vaticano II: "El conjunto de los fieles, porque tiene la unción del Espíritu Santo (cfr. 1 Jn. 2, 20-27) no puede equivocarse cuando cree, y esta peculiar propiedad suya la manifiesta por el sentido sobrenatural de fe de todo el pueblo cuando, desde los Obispos hasta los últimos fieles, presta su consentimiento universal en lo referente a la fe y costumbres. Con este sentido de fe... y bajo la guía del sagrado Magisterio... se adhiere infaliblemente a ella, con certero juicio la penetra más profundamente y la aplica más plenamente a la vida" (L.G. 12).
Esta precisa y espléndida formulación conciliar no puede ser más explícita. Y es que la misma prerrogativa de infalibilidad concedida por Jesús a su Vicario mediante la asistencia del Espíritu Santo, tiene precisamente como finalidad que el conjunto del Pueblo de Dios, su Iglesia y Cuerpo místico, no se equivoque, por ejemplo, con una devoción aceptada por todos.
En consecuencia: Si la promesa del Escapulario aplicada a todos los fieles (proceda de la visión de San Simón Stock o de donde sea) no fuese verdadera, el Espíritu Santo no hubiera permitido que la Iglesia, el conjunto del Pueblo de Dios, la tuviese por cierta. Para muchos la prueba es irrefutable, ni para ello es necesaria una definición del Magisterio Supremo. Aunque sí hubo controversias y fueron dirimidas por la Santa Sede
Fuente: Aciprensa.

viernes, 11 de julio de 2014

Ora et Labora







Benito de Nursia, conocido como San Benito, nació en (Nursia, cerca de la ciudad italiana de Spoleto, 480 – Montecasino, 547), fundó la orden de los benedictinos y es considerado patrón de Europa y patriarca del monaquismo occidental. Benito escribió una Regla para sus monjes que fue llamada "La Santa Regla" y que ha sido inspiración para los reglamentos de muchas otras comunidades religiosas. 

Su hermana gemela, Escolástica, también alcanzó la santidad.

Después de haber recibido en Roma una adecuada formación, estudiando la retórica y la filosofía.

Se retiró de la ciudad a Enfide (la actual Affile), para dedicarse al estudio y practicar una vida de rigurosa disciplina ascética. No satisfecho de esa relativa soledad, a los 20 años se fue al monte Subiaco bajo la guía de un ermitaño y viviendo en una cueva.

Tres años después se fue con los monjes de Vicovaro. No duró allí mucho ya que lo eligieron prior pero después trataron de envenenarlo por la disciplina que les exigía.

Con un grupo de jóvenes, entre ellos Plácido y Mauro, fundo su primer monasterio en en la montaña de Cassino en 529 y escribió la Regla, cuya difusión le valió el título de patriarca del monaquismo occidental. Fundó numerosos monasterios, centros de formación y cultura capaces de propagar la fe en tiempos de crisis.

Vida de oración disciplina y trabajo

Se levantaba a las dos de la madrugada a rezar los salmos. Pasaba horas rezando y meditando. Hacia también horas de trabajo manual, imitando a Jesucristo. Veía el trabajo como algo honroso. Su dieta era vegetariana y ayunaba diariamente, sin comer nada hasta la tarde. Recibía a muchos para dirección espiritual. Algunas veces acudía a los pueblos con sus monjes a predicar. Era famoso por su trato amable con todos.

Su gran amor y su fuerza fueron la Santa Cruz con la que hizo muchos milagros. Fue un poderoso exorcista. Este don para someter a los espíritus malignos lo ejerció utilizando como sacramental la famosa Cruz de San Benito.

San Benito predijo el día de su propia muerte, que ocurrió el 21 de marzo del 547, pocos días después de la muerte de su hermana, santa Escolástica. Desde finales del siglo VIII muchos lugares comenzaron a celebrar su fiesta el 11 de julio. 

La medalla de San Benito

La medalla de San Benito es un sacramental reconocido por la Iglesia con gran poder de exorcismo. Como todo sacramental, su poder está no en si misma sino en Cristo quien lo otorga a la Iglesia y por la fervorosa disposición de quién usa la medalla.

Descripción de la medalla:


Medalla de San BenitoEn el frente de la medalla aparece San Benito con la Cruz en una mano y el libro de las Reglas en la otra mano, con la oración: "A la hora de nuestra muerte seamos protegidos por su presencia". (Oración de la Buena Muerte).

El reverso muestra la cruz de San Benito con las letras:

C.S.P.B.: "Santa Cruz del Padre Benito"
C.S.S.M.L. : "La santa Cruz sea mi luz" (crucero vertical de la cruz)
N.D.S.M.D.: "y que el Dragón no sea mi guía." (crucero horizontal)

En círculo, comenzando por arriba hacia la derecha:
V.R.S. : "Abajo contigo Satanás"
N.S.M.V. : "para de atraerme con tus mentiras"
S.M.Q.L. : "Venenosa es tu carnada"
I.V.B. : "Trágatela tu mismo".
PAX : "Paz"

ORACIÓN PARA PEDIR SU PROTECCIÓN

Santísimo confesor del Señor;
Padre y jefe de los monjes,
interceded por nuestra santidad,
por nuestra salud del alma, cuerpo y mente.

Destierra de nuestra vida,
de nuestra casa,
las asechanzas del maligno espíritu.
Líbranos de funestas herejías,
de malas lenguas y hechicerías.

Pídele al Señor,
remedie nuestras necesidades
espirituales y corporales.
Pídele también por el progreso de la santa Iglesia Católica;
y porque mi alma no muera en pecado mortal,
para que así confiado en Tu poderosa intercesión,
pueda algún día en el cielo,
cantar las eternas alabanzas.
Amén.

Jesús, María y José os amo, salvad vidas, naciones y almas.

Rezar tres Padrenuestros, Avemarías y Glorias.
Fuente: Catholic.net