miércoles, 23 de julio de 2014

Confía en mí.


Cuando vi esta imagen pensé en compartirte lo que se que a ti también te hizo sentir, en muchas ocasiones, de hecho en la mayoría de las circunstancia de nuestra vida, no sabemos cómo responder cuando Dios nos pide algo.


Pero no te has puesto a pensar porque si él es el Padre más amoroso, quién es el único que nunca te falla y que te lo ha demostrado en tantas ocasiones en tu vida de diferentes maneras y aún así te cuesta trabajo responder con facilidad a lo que él te pide, a hacer su voluntad, a entregarle lo que tienes, lo poco que de tu parte posees.
Pues hacer la voluntad de Dios no es fácil, pero no es por el mismo Dios o porque él te pida mucho, el sólo te pide confiar, eso es lo único que te pide, CONFIAR, pero creo que eso es lo difícil, ese es el problema.

Siempre sabemos que Dios nos da lo mejor, sólo debemos aprender a desprendernos de nuestros propios deseos y aspirar a anhelar los deseos de Dios, es decir, elevar nuestros anhelos, nuestros ideales y nuestros sueños.

Nunca lo que deseamos es tan bueno como lo que Dios tiene para nosotros y nunca es tan difícil aceptarlo como cuando vemos solo con nuestros ojos, y esto es por algo muy sencillo, nuestros anhelos siempre son muy terrenales, no es malo, pero el quiere darnos algo que nunca termina,por eso empieza a trabajar en conocer primero el amor de Dios, porque no podrás nunca darte cuenta de lo que él quiere para ti y de cuanto te ama si tu sólo piensas en ti.
Pon lo poco que tienes en manos de quien te ama, y el pondrá en tus manos dones, bendiciones y muchas cosas más de las que puedes imaginar.

Así que no te limites a pensar en tus deseos, mejor piensa en sus deseos y confía, siempre confía en su amor infinito, déjate amar por él, que nunca te va a pedir para dejarte con las manos vacías.

Autor: Myriam Orozco

No hay comentarios:

Publicar un comentario