viernes, 8 de agosto de 2014

Hoy visite el Cielo para darte un abrazo.


Hoy es un día muy especial, pensaba como explicar lo que he sentido ahora que hace un año que no estás conmigo, y es que vivimos tantos momentos juntos, fue tanto el amor que nos diste y tanto el bien que siempre nos procuraste, con tus oraciones, tus sacrificios, tu entrega, que simplemente quise pensar o no, quiero asegurar que ese mismo amor con el que te entregaste lo seguirás teniendo aún estando en el cielo o quizá aún más, pero como puedo explicarles a todos esa certeza que tengo que tu estas feliz?, que tu estas bien?, como les explico cuando  se te extraña tanto?.






Pues encontré una manera de hacerlo y es que solo platicando contigo podrías decirme cómo explicarles que tu estas muy feliz, eso sé que a todos les dará esa paz que tanto necesitan,  y sé que la obtendré al platicarles lo que acabo de ver.

Ayer por la noche pedí con todas mis fuerzas poder verte en mis sueños y charlar así como siempre lo hacíamos, con la misma ilusión y platicarte todo lo que ha pasado desde que no estás, Tío, es que han pasado tantas cosas……. Algo especial me decía esta noche que iba a suceder, primero porque tú ya sabes que me encanta la lluvia, me imagino que no lo has olvidado, y antes de hacer la ultima oración de la noche, comenzó una lluvia tan especial, que me estaba indicando lo que en momentos iba a comenzar a vivir, sí, a vivir, pues fue más que vida lo que quisiste compartir conmigo.

Me preparé para descansar, cerrando mis ojos con mucha tranquilidad, ya no escuchaba voces, sólo sé que una luz muy fuerte me guió hacia dónde te encontrabas…… Sí estoy en el cielo, pero, como puedo yo estar aquí? …… Ya no recuerdas lo que pediste? _ una voz muy dulce escuche diciéndome estas palabras…. Una charla con aquel al que tanto extrañas.
En ese momento, recordé que no había nada que te pidiera a lo que tú no respondieras con un sí. Es él, como siempre, es mi Tío, que me sigue consintiendo  desde el cielo.
Me condujeron a el lugar dónde aguardabas por mí, algo sorprendente, mucha paz, tanta quietud, amor, todo se sentía al estar en ese lugar…. Nubes por todos lados. Espera que te tienen una sorpresa., no lo dude  ni un segundo, así fuiste siempre, tan especial y siempre nos recibías con sorpresas. Claro y sin dudar, les dijiste a tus amigos los ángeles todo lo que me agradaba, pues las canciones que pusieron tú sabías que me gustaban.

De repente, por fin, llegué  a tu habitación, donde me estabas esperando, no sabía qué hacer cuando te vi, estabas tan bonito, y tu rostro estaba resplandeciente, no puedo explicar la felicidad que había en tu rostro, simplemente no era de este mundo……. Myriiii!!!! Bienvenida, me dijiste al entrar.

Si, ese eras tú, así me recibías, y sí, soy yo, tu Myri…. La misma de siempre.

No pude contener las ganas de abrazarte, y corrí a tus brazos…..No sabes cuánto te he extrañado, te dije con lágrimas en los ojos.  Tu olor, no sé como describirlo, olías a mar, a rosas, a incienso, olías a vida, vida de verdad. La fuerza que me dio abrazarte no la puedo describir. Me llenaste de luz.

Tío, han pasado tantas cosas, como en los viejos tiempos, te lo voy a platicar….Me escuchaste tan tierno y cariñoso como siempre. Tío mira que mi abuelita piensa mucho en ti. Yo lo sé, me contestaste, yo pienso aún más en ella.

Hay una razón por la que tú estas aquí, me dijiste con una voz suave.

Yo sé lo que tú has vivido, yo sé todo lo que han sentido en este tiempo que ya no he ido a visitarlos, pero ustedes no saben lo que yo aquí estoy viviendo, quiero que seas la portadora de la más grande dicha que jamás se imaginan que estoy experimentando. Te escucho Tío, platícame.

Se levantó de donde estaba y saco un pergamino con muchas letras. Espera, falta algo más…. Se dirige a un costado y me muestra 3 cosas, un crucifijo, un Rosario y una estampa de la Virgen.

Yo no podía creer lo que estaba viendo, era la imagen de la Virgen de Guadalupe que yo tengo en mi recamara, tu Virgen, Tío ahora ella me cuida todas las noches… Te dije con ilusión.

Enseguida, sacaste el pergamino y me mostraste que en él estaban los nombres de toda la familia, incluyendo el mío. Esto, me dijiste es el más bello regalo que quiero que te llevas, anda y diles que este pergamino lo he escrito ayudado por la Virgen, nuestra madre del cielo, con ella platico todos los días, a ella se los he encomendado y todos los Ángeles me han ayudado a escribirlo, cada uno tiene un Ángel que la Virgen les ha encomendado.

Tío entonces ella nos conoce?..... No sólo eso, ella los ama y los protege en cada segundo de sus vidas. Es la madre más amorosa que se puedan imaginar, ella ha intercedido por mí para que yo los siga cuidando siempre. 

No pude contener mis lágrimas, en ese momento comprendí porque en todos los momentos en que necesitaba fuerzas, siempre sentí una mano tan fuerte y tan llena de luz. Ahora comprendo porque me he sentido tan cerca de ella y de Dios, ahora comprendo porque en verdad nunca he estado sola, y sé que tú estabas siempre a mi lado, yo lo sabía.

Así es, todos los días al ver la imagen de la Virgen en mi recamara me llenaba de fuerza, es que tu siempre le platicas de mí, ahora entiendo.

Pues entonces ve y diles lo que viste, ve y muéstrales lo que hago cada día, diles que no me olvido de ellos y que nunca lo haré. Diles también que confíen en Dios, en su sabiduría, en sus tiempos, pues él los ama por sobre todas las cosas. Cuéntales que estoy más feliz que nunca, que puedo gozar de una paz que nunca había experimentado y que todos los días aquí están llenos de luz, aquí sólo existen bendiciones, diles también que yo ya no siento nada más que dicha pues siempre estoy cerca del infinito amor de Dios y la Virgen.

Anda ve y muéstrales que todos están rezando por ustedes, porque lo que hacía allá aquí da más frutos. Anda ve y cuéntales que hoy soy el más feliz y que estoy preparando un espacio para todos, aquí desde el magisterio de los Santos.

Sí Tío, no sabes que Feliz me has hecho, no sabes cuanta dicha siento al verte tan contento, cuando se ama a alguien tanto lo único que se desea es su felicidad y  ahora entiendo que no podrías ser más feliz como lo estás ahora. Sólo recuerda que te amamos con todo nuestro corazón y que ahora sabemos que tú siempre vas a estar con nosotros, nada se compara con lo que acabo de ver, si supieran, si tan solo supieran.

Tome mi pergamino, mi Rosario, mi crucifijo, mi Virgencita y recibí de ti, como siempre tu bendición, la cual siempre me va a acompañar. Pusiste tus manos sobre mi cabeza y todo en mí cambio. Eras tú intercediendo por mí ante toda la corte celestial para derramar las más grandes bendiciones en mí. Nunca te dejaste ganar en generosidad y cuán grande es mi dicha al saber que siempre estás conmigo.

Recibe este abrazo y no olvides nunca que aquí los voy a estar esperando, por último, dile a mi Madre que ella tiene y siempre tendrá un lugar especial en mi corazón y ahora mucho más al lado de la Virgen……fueron sus palabras finales.

No puedo decirte que no te vamos a extrañar Tío, le dije por último, ya sabes, nosotros aún sentimos eso que  tu ya no conoces, sin embargo hoy soy muy feliz porque ahora si tengo la certeza de que tú estás en el mejor lugar, ese que Dios y la Virgen siempre te tuvieron reservado. Te quiero Tío, mi ANGEL GUARDIAN. Pbro. Alfredo Zarate Escoto por siempre en nuestros corazones y nosotros en el tuyo.



08 de Agosto del 2014 Un año menos para alcanzarte en el cielo. Te amamos.


Autor: Myriam Orozco Zárate.

No hay comentarios:

Publicar un comentario