martes, 13 de mayo de 2014

Consagración a la Reina de la Paz: Día 2


Día 2º de preparación para consagrarme a la Reina de la Paz;

La Visitación

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén

Salmo 113 (112)





¡Aleluya!

Alabad, siervos del Señor,

alabad el nombre del Señor.

Bendito sea el nombre del Señor,

ahora y por siempre:

de la salida del sol hasta su ocaso,

alabado sea el nombre del Señor.

El Señor se eleva sobre todos los

pueblos, su gloria sobre los cielos.

¿Quién como el Señor, Dios

nuestro, que habita en las alturas

y se abaja para mirar al cielo y a la tierra?

Levanta del polvo al desvalido,

alza de la basura al pobre,

para sentarlo con los príncipes,

los príncipes de su pueblo.

A la estéril le da un puesto en la

casa, como madre feliz de hijos.

¡Aleluya!

12 junio 1986

"Queridos hijos, hoy os invito a comenzar a rezar el Rosario con fe viva. De este modo podré ayudaros. Vosotros, queridos hijos, deseáis recibir las gracias pero no oráis. No puedo ayudaros porque no os decidís a actuar. Queridos hijos, os invito a rezar el Rosario para que el Rosario sea un compromiso que cumpláis con alegría. Así comprenderéis por qué estoy tanto tiempo con vosotros. Deseo enseñaros a orar. Gracias por haber respondido a mi llamada."


Meditación

Rezo para alcanzar el don de la humildad. Para tener un corazón humilde como el de María. Que siendo Madre del Salvador visita a Santa Isabel y va con alegría. Su oración es vida y su vida oración. Lo que hace, dice y piensa es una alabanza a Dios.

Ella oraba en todo tiempo y lugar. Por eso Ella en Medjugorje nos dice: “orad

con fe viva. Que el Rosario sea vuestro compromiso diario. Así podréis omprender por qué os visito durante tanto tiempo”. Al igual que Santa Isabel, necesito de la Reina de la Paz en mi vida. Ella me lleva a Jesús. Ella hará que pueda orar, rezar el Rosario.

 Tomo un Rosario, beso la cruz, miro a María y le digo que me enseñe a meditar la vida de Cristo con esta oración. Madre, tú quieres que ore y que tenga fe para que sea una fe vivida. Ora conmigo y haz que mi oración sea con el corazón.

Solo la gracia de Dios puede hacer esto en mi. Solo así mi oración será con amor y alegría, se transformará en gozo y alabanza como nos dice este salmo.

Que cuando haga la señal de la cruz, lo haga despacio pensando que en Ella mi Señor me salvó y me perdonó. ¿Qué significa hacer la señal de la cruz para mi? ¿lo hago sin pensar, de modo rápido y rutinario? ¿oro el Padrenuestro? ¿De verdad quiero la voluntad de Dios en mi vida? ¿Rezo cada Ave María con mi pensamiento, alma y corazón en ti María? Pienso y medito cada misterio del rosario contemplando lo que tú viviste Madre? ¿Glorifico con mis palabras y mis obras a Dios? María Reina de la Paz haz que comprenda que solo con la oración puedo vivir la fe. Conocer, sentir y abrazar el amor de Dios que me ama y perdona. Solo así, puedo tener alegría en medio de mi día a día y sufrimientos. Solo podré vivir según Tú si oro de corazón.

 Así la Paz reinará en mí. Yo no puedo orar de corazón si me falta reconciliación. María, haz que yo me una a Jesús y que pueda pensar y sentir como Él. Que yo ore todos los días con el rosario, y, de corazón. Que ame y perdone para que mi

vida sea fe y alegría cristiana. Alabanza al Padre y pueda decir con María, roclama mi alma la grandeza del Señor que ha hecho grandes cosas en mi vida. AMÉN

1 Padrenuestro, 10 Ave Marías y 1 Gloria


Oh Jesús mío perdona nuestros pecados, líbranos del fuego del infierno, lleva al cielo a todas las almas especialmente las más necesitadas de tu divina misericordia.

 María, Reina de la Paz, ruega por nosotros y por la paz del mundo entero.

 Oración Final

Gracias, María, por tu visita a Isabel, la cual le ayudó a confiar y a experimentar el amor de Dios. Este amor se manifestó a través de tu presencia y de esa manera, Isabel fue capaz de glorificar y dar gracias al Señor y regocijarse con tu presencia y la presencia de tu Hijo no nacido. Te pido que visites a todos los que nos estamos preparando para consagrarnos, a nuestras familias y a los grupos de oración y a todos los padres y a sus hijos, a fin de que podamos experimentar el amor de Dios. Que este amor pueda morar en medio de todos los hombres y sea el fundamento de la paz. Que la experiencia del amor de Dios sane los corazones de los que nos preparamos para consagrarnos a tu Corazón, para que podamos vivir en paz por la intercesión de la Reina de la Paz. AMÉN

"Grupo Oficial Totus Tuus Reina de la Paz"

Puedes encontrar este documento en www.totustuusreinadelapaz.org


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